sábado, 5 de junio de 2010

Placer Sexual



Placer sexual es la respuesta del sistema nervioso central que puede ser provocada por una estimulación sensitiva en órganos sexuales y como consecuencia de la liberación de la hormona noradrenalina producida en la médula suprarrenal. La excitación para este placer puede simplemente ser psicológica.

El placer es una respuesta agradable, en este caso vinculada a la sexualidad.


El placer forma parte de los derechos

sexuales y se considera fuente de bienestar físico, psicológico, intelectual y espiritual.


La mujer fue históricamente postergada en el aspecto del goce y el erotismo y es mucho el terreno que le queda por ganar, aunque ha habido avances significativos en los últimos años.

El siglo XX fue el de las mayores conquista

s. Sexólo

gos y grupos feministas demostraron que la anatomía femenina era mucho más compleja de lo que se pensaba y precisaron las zonas de mayor estimulación en el cuerpo de la mujer.


Pero quizás, el hecho más significativo ocurrió en

los años 60, durante la llam

ada revolución sexual: la creación de anticonceptivos

artificiales.




Entendiendo el placer

En los años 50, el ginecólogo Ernest Gräfenberg reveló la existencia del punto G, aunque años más tarde -con ayuda de la investigación de grupos feministas- se descubrió que el clítoris es el órgano sexual con mayor capacidad de estimulación en la mujer.

También se estableció que no hay dos orgasmos, sino uno solo, de estimulación clitorídea y reacción vaginal, y que la mujer es potencialmente multiorgásmica.

Además, se reconoció que el erotismo es diferente en cada mujer y que el cerebro es el principal órgano del placer, ya que se encarga de procesar los estímulos que provienen tanto del cuerpo como de la mente.

El autoerotismo, o la masturbación, reconocido como derecho sexual, se convirtieron en la recomendación fundamental de los sexólogos para entender el goce propio, junto a la imaginación y las fantasías.

Muchas de las tendencias en la respuesta sexual femenina se conocieron gracias al trabajo de William H. Master y Virginia Jonson, que revolucionaron el campo de la sexología en los años 70.




No hay comentarios:

Publicar un comentario